El Vientre de París - Émile Zola Editorial Edaf. Traducción de Aníbal Froufe: Excelente, 470 Pag. Esta novela la consideraría como un documento sobre el mercado de las Halles en París, donde las descripciones son, no solo excelentes sino más bien inigualables, detalladas, luminosas, pictóricas. Con explicaciones y referencias que dan la impresión de estar ahí mismo. La luz , la suciedad, la humedad, el desprecio por la vida animal y por el sufrimientos de aves, mamíferos y peces que se multiplica a modo de “genocidio diario”, en contraposición a las frutas y verduras o a las flores que ponen color ante esta bárbara carnicería. El personaje principal es Florent un fugado de Cayena que vuelve a París y trabajará como inspector en este mercado central. Este hombre desprecia el dinero y solo vive para hacer el bien a los demás, pero está persuadido por la revolución teórica, sus pensamientos y escritos están dominados por establecer una sociedad más justa y ordenada. El libro me ha resultado pesado y duro de leer, sobre todo por las descripciones del maltrato animal, me ha costado acabarlo, no lo recomendaría a los jóvenes. En lo tocante a la ética y moral social nos relata la típica sociedad burguesa y gremial donde lo que prima es la estabilidad y no preocuparse de la política, sino más bien de los chismorreos (La tele de hoy). El libro termina con la Frase “Que granujas son las personas honradas”, magnífico final. Me abstengo de recomendar este libro, a pesar de ser una gran obra a mi parecer.
hace 1 año