Narra la vida de Gervais, una mujer casada con un vividor –Lantier- que la engaña y acaba abandonándola por otra mujer. La protagonista, sola, con hijos que alimentar y en la pobreza, trabaja en lo que puede hasta que se casa con un antiguo conocido, Coupeau, que está enamorado de ella. Todo parece marcharles aceptablemente hasta que el marido tiene un accidente laboral. Éste cambia la vida de Coupeau: se entrega a la bebida y, con ello, va abandonando el trabajo, entrando en una progresiva degradación. Entretanto, Gervais ha cumplido su sueño de tener una pequeña tienda propia y con ella mantiene a la familia. Su marido, que era una buena persona, honrado y trabajador, continúa su decadencia. Entonces reaparece Lantier, que no puede traer nada bueno. Y así es, en efecto. Curiosamente, se hace amigo de Coupeau, al que termina de degradar, e intenta recuperar a Gervais, quién lo rechaza. Pero el hundimiento definitivo de su marido la arrastra a ella, que, desde entonces, alterna con él de taberna en taberna.