El mayor Reisman, un militar experto en la guerra de guerrillas, y toda una eminencia en el sabotaje del enemigo, recibe la orden de realizar una misión suicida, y muy sucia, que se basa en convertir a un grupo de los más peligrosos presos, algunos condenados a muerte, en la verdadera élite del ejército. La misión consiste en lanzar un grupo de paracaidistas cerca de una mansión en la que oficiales del ejército alemán tienen instalado un puesto de alto mando, centro vacacional y fuerte de defensa, tomarla por sorpresa, dinamitar el sótano a fin de causar la muerte de la mayor cantidad de oficiales alemanes para desmoralizar al ejercito alemán, y por último, huir si es posible. Una vez que ha seleccionado a sus hombres, el mayor los entrena con mano dura pero justa, con lo que se gana la confianza del grupo, afrontando incluso a oficiales de mayor rango, con tal de demostrar que los buenos soldados siempre lo siguen siendo a pesar de sus errores. Cuando llega el momento, todos están preparados para llevar a cabo la misión, pero poco a poco se daña el plan, y tienen que improvisar a fin de cumplir con la misión.