Buen broche para finalizar esta trilogía. Si bien, ya que he calificado con la misma nota los tres libros, me gustó más y me pareció más redondo el segundo tomo: “Mala hierba”. “Aurora roja” se desvincula un poco de la línea seguida con las 2 primeras novelas. El texto aparte de reflejar las diferentes clases (especialmente bajas) de la sociedad española de principios del siglo XX, se centra más en la problemática de los obreros y el texto posee un cariz más crítico (iniciado en “Mala hierba”) y duro contra las instituciones políticas y del gobierno. La historia se inicia con Juan, el hermano del protagonista, que tiene tanta importancia e incidencia en la narración como el propio Manuel. Con él, y “arrastrando” a su hermano (menos abúlico y fuera de la miseria que le rodeaba anteriormente), nos adentra en el mundo anarquista y de las ideas revolucionarias. Se exponen las diferentes versiones de esta filosofía política que se convierte en la última esperanza de la gente oprimida. Hay un análisis frío de la “idea” y de los variados caracteres que siguen cada distinta doctrina, que abarca dese el más ingenuo, el solidario y llegando hasta el más cruel. Muchos capítulos se dedican exclusivamente a analizar la justicia social, el régimen político, las instituciones, la pena de muerte, los derechos individuales o las leyes. Hay una conclusión realista y cruel, enunciada por el personaje de Roberto, que rechaza toda utopía social y la única solución para el ser humano está en la lucha por la vida. Y en paralelo con este “estudio social” aparecen tramas y personajes de las novelas anteriores que se han trabado en la vida de Manuel, asistiendo cómo han evolucionado o que ha sido de su vida o muerte.
hace 10 años