La trilogía de novelas autónomas que Pío Baroja (1872-1956) englobó bajo el título «Las ciudades», integrada por César o nada (1910), «El mundo es ansí» y «La sensualidad pervertida», constituye un espléndido retrato del clima social, espiritual, intelectual y político de la España de la época. Imbuido de una moral individual de corte nietzscheano, César Moncada se entrega a la acción política. Considerando, en la línea de algunos regeneracionistas, que España sólo puede superar la decadencia mediante un gobierno fuerte y autoritario, pero progresista, que combata el caciquismo, el poder de la Iglesia y las desigualdades sociales, intenta poner en práctica sus ideas en el imaginario pueblo zamorano de Castro Duro, pero el sustrato en que éstas se sustentan un sentimentalismo paralizador, falta de voluntad y una acusada abulia lo conducen al fracaso.