Se conoce con el nombre de «apócrifos» todos aquellos textos que por una razón u otra no han sido incluidos a lo largo del tiempo entre los libros sagrados canónicos del judaísmo y el cristianismo, cuyo establecimiento definitivo culminó (por lo que concierne a la Iglesia católica) en el Concilio de Trento (1546). De índole sumamente variada, narran desde vidas y episodios de los más diversos personajes de ambos testamentos hasta textos sapienciales. No pocas veces versan sobre etapas o puntos oscuros de la vida de Jesús y sus discípulos, no se pliegan a la doctrina oficial y son rechazados como «heréticos». Apócrifos del antiguo y del nuevo testamento es una antología a cargo de Antonio Piñero, destacado especialista en este tema, que reúne los más sustanciales y controvertidos de ellos. La introducción, a cargo del propio Piñero, aclara de forma ejemplar la problemática que suscitan estos textos, así como el justo lugar que se les debe asignar, principalmente como elementos válidos para la historia de la teología y de las ideas religiosas, así como para la historia de la iconografía y de la literatura cristianas.