Mediante una reconstrucción sociológica de la teoría performativa de género de Judith Butler y un estudio empírico del colectivo transexual, Patrícia Soley-Beltran deshace malentendidos sobre la noción del cuerpo Butleriana y su problematización de la distinción sexo/género, al mismo tiempo que ilustra las transformaciones recientes del feminismo, desde las políticas de identidad gays y lesbianas, hasta la teoría queer y los movimientos transgénero. El marco interpretativo, constituido por la teoría performativa de las instituciones sociales (desarrollada principalmente por los sociólogos de la ciencia Barry Barnes y David Bloor) y la noción de tipo artificial (desarrollada por el filósofo Martin Kusch), comparte afinidades con el pensamiento de Butler: problematizar la dicotomía naturaleza/cultura y poner de relieve la construcción social del conocimiento científico sobre el cuerpo. El estudio empírico comparativo se aproxima al colectivo transexual británico y español como informantes de los procesos de adaptación a las normas de género de todos los miembros de la sociedad. El análisis de sus testimonios no sólo aporta datos acerca del conocimiento popular hegemónico sobre género y la incidencia de categorías médicas en su definición, sino que también aclara sin prejuicios ni partidismos las características de este colectivo y lo sitúa en sus contextos ideológico y socio-políticos, iluminando así el panorama cultural en el que se desarrollan las actuaciones legales y médicas.