Uno de los tópicos más consolidados en torno a Fernando Pessoa tiene que ver con su vida o, mejor, con su ausencia de vida. Sin embargo, su apariencia de hombre tímido, solitario, incapaz de abandonar esa jaula-universo de Lisboa no le impidió convertirse en uno de los poetas de referencia de estas últimas décadas. Mucho más cómodo en la irrealidad que en la realidad, siempre urdió mundos y personajes con los que no solo se relacionó, sino que con ellos construyó un universo paralelo propio que nos sigue causando asombro intelectual. Manuel Moya, traductor de Pessoa y estudioso del personaje, nos presenta en esta biografía una visión que se aleja de muchos de los clichés que han rodeado la figura del poeta portugués. Con este ensayo, Moya intenta dar una interpretación cabal de la desasosegante peripecia vital e intelectual de este escritor singular que intentó pasar de puntillas, no siempre con éxito, por una vida muchísimo más rica y extraordinaria de lo que se suele creer.