Es el terror del siglo IX. Feo, fuerte, informal. Es Hagar el horrible, rey de los vikingos. Un salvaje con alma de niño a quien acompaña el buen humor. Hagar no se arredra ante nadie… excepto ante su esposa Helga, testaruda y quejumbrosa y que cree (a veces) que su marido se dedica a la importación. La familia se completa con Honi, guapa valkiria que solo piensa en encontrar un novio que no se asuste de su aspecto guerrero, y con Hamlet (estamos en Dinamarca, a fin de cuentas), un niño sensible y culto que lee libros y tiene la peregrina idea de que la Tierra es… ¡redonda! Sumen ustedes al torpe Fortunato, la mano derecha (¿o es izquierda?) de Hagar y tendrán la risa asegurada.