En el año 1927 Albert Londres viajó de incógnito a Argentina para llevar adelante una investigación sobre la trata de blancas. El camino de Buenos Aires, fruto de esa investigación, es mucho más que una crónica ocurrente o el relato de un viaje por el “paraíso de los rufianes”: constituye un testimonio polémico sobre Argentina y un precioso documento sobre el circuito internacional del hampa. “En Buenos Aires el barco se detiene durante ocho días. Cuando las chicas son descubiertas, y en caso de que no sean muy “bonitas”, las autoridades sudamericanas las vuelven a embarcar sobre el mismo paquebote. Pero jamás se ha visto que una linda franchuta sea llevada nuevamente a bordo.”