Relato corto, ambientado en una ciudad del sur de Rusia, junto al mar Negro. Ismael Baruch, hijo de una humilde familia judía, descubre con 10 años que tiene un don natural para inventar versos y canciones. "Rescatado" de su día a día miserable por una dama noble, la vida y destino del "niño prodigio" cambiará para siempre. No es lo mejor que he leído de la autora, creo que la historia podía haber dado más de sí, pero le disculpa el hecho de que fuese una de sus primeras obras. De todos modos, es un relato interesante que nos habla de la infancia y su inocencia, la pérdida de ésta, el talento y sus crisis... y como fondo temas comunes en la obra de la autora: hijos ignorados por sus padres, familias que han perdido su fortuna, y cierta crítica social. Y como en el resto de sus obras, está escrito con una prosa cuidada, gran sensibilidad y buena descripción de personajes. Muy corto y fácil de leer.
hace 10 meses