Después de la colosal Vida y Destino, Todo fluye se considera como el testamento político y literario del gran Vasili Grossman. Con su magnífica prosa, lo que comienza como una novela acaba siendo una especie de brutal y conmovedor ensayo para exponer la realidad de los horrores de la Unión Soviética en los tiempos de Lenin y Stalin, que el autor vivió de primera mano. Una obra excepcional que además de retratar las miserias de la condición humana, es un grito contra el totalitarismo y sus terribles y despiadadas consecuencias. La falta de libertad, las ejecuciones masivas, las delaciones por miedo, las condenas sin pruebas, los crueles destierros de los que nunca se volvía, el genocidio... especialmente ese salvaje holodomor, instado por Stalin, durante el cual millones de personas murieron de hambre, descrito con una crudeza que pone los pelos de punta, ante el vil silencio que envolvió este estremecedor suceso. Otro novelón de Vasili Grossman, que te deja sin aliento
hace 10 meses