El primer capítulo es tan impactante y sobrecogedor que la lectura te engancha y ya no puedes parar hasta llegar al desenlace final que me ha parecido muy bien resuelto. Seguiré recomendando a Lemaitre.

Me habían hablado maravillas de este libro y esperaba más. A veces se me hizo aburrido sobre todo hasta que salen del hospital. El final lo suelta de sopetón y me hubiera gustado conocer las reacciones de la familia de Edouard.

Excelente libro, aunque deja un sabor amargo...

Me esperaba algo más dada la fama del autor que parece que está de moda. No está mal el argumento pero me parece un poco banal. Novela del montón. Igual soy muy exigente pero las he leído muchísimo mejores. Recomendable a medias

Si bien no me cerro del todo el desenlace, es una novela interesante sobre un tema que a uno no se le ocurre que puede pasar: que hacer con los cuerpos muertos y enterrados en el campo de batalla? Y cómo siempre encontrarás un desalmado con la capacidad de enriquecerse a costa de los que dieron su vida por el país. Buena crítica a la guerra pero sobre todo a los efectos de la postguerra en los excombatientes.

No quiero decir que sea una novela excelente para mi gusto. Pero me ha encantado y es admirable los diferentes matices y registros que maneja el escritor magistralmente.La atmósfera y la caracterizacion de los personajes le quedaron muy bien.

Muy recomendable. Resalto varios puntos que me han llamado la atención, el primero, lo del chanchulleo, por conocido no deja de impactarme que no tengamos arreglo. El segundo, lo de la logística en la desmovilización, nunca me había parado a pensar en este tema, impresionante. Por lo demás, muy dinámico. Os lo vais a pasar bien.

Un libro excelente, muy bien escrito y con unos personajes muy bien construidos. Engancha a pesar de la dureza del trasfondo que describe. Muy recomendable.

Gran libro. Feroz crítica a la guerra y a los trapicheos generados por la misma. Contado en clave de humor negro, sin héroes. Todos los personajes son perdedores, que luchan por salir del agujero en el que se encuentran metidos por distintos motivos, no siempre nobles. Pese a su crudeza tiene ese trasfondo de ternura que acaba dejando un sabor agridulce.

Existen varias posibilidades a la hora de valorar un libro, al menos para mí. Por un lado está la historia, la trama, si esta te atrapa o no. Por otro, los personajes, lo simpáticos o antipáticos que te resulten, y si tienen matices, son diferentes entre sí, o por el contrario resultan planos. Y por último está la narración en sí misma, cómo está escrito el libro. Nos vemos allá arriba es Premio Goncourt 2013, luego la calidad de su prosa está garantizada, nos sorprenderá a nadie si digo que es un verdadero deleite disfrutar de sus páginas.
Respecto a la historia, me resulta desigual, por una parte la relación de amistad entre Albert y Edouard se me ha hecho pesada, por momentos aburrida. Sin embargo, la estafa del Capitán Pradelle es muy absorbente y entretenida.
En cuanto a los personajes, de nuevo Pradelle y algún secundario como Pericourt y Merlin son soberbios, están logradísimos. Por contra, Albert es tan pusilánime y blando, que aún reconociendo al autor su logradísima construcción de personajes y su riqueza, variedad de matices y diferencias, creo que en ocasiones lastra la fluidez y lo atrapante de de la narración.
A causa de lo anterior, la historia me parece desigual, estoy deseando llegar a las páginas de Pradelle y abandonar las de Albert que en ocasiones se me hacen aburridas, particularmente su relación de amor-amistad con Edouard.
Con todo, hay que reconocerle todo el mérito al señor Lemaitre pues logra una novela con altibajos pero que se acerca mucho a la perfección. Muy buena lectura, muy recomendable, un folletín casi perfecto.

Anoche terminé “Nos vemos allá arriba" y me dejó tocada. La novela arranca en las trincheras ensangrentadas y llenas de cadáveres de los soldados, que, en noviembre de 1918, han caído sin poder ver el cercano final de la Gran Guerra. Sin embargo, un hecho trágico hará que el destino de dos jóvenes soldados de muy diversa condición social y manera de ser, se vea abocado a ayudarse, entenderse y sobrellevar juntos su traumático futuro. La trama cuenta con unos personajes magistralmente trazados y una historia trepidante en la que se entremezclan sentimientos de compasión, amistad, odio, ternura, horror… todo ello con el trasfondo del obsceno negocio que para algunos supone la guerra: antes, durante y en este caso, después de la misma: fabricación de ataúdes, traslado de cadáveres, exhumaciones, cementerios, monumentos…dedicados a esos millones de soldados muertos, que suponían ingentes cantidades de dinero para una serie de personajes ambiciosos y carroñeros muy bien descritos en la novela. Pero la historia toca la fibra sobre todo, por la descarnada relación de ternura y amistad entre los dos hombres; uno de ellos, brillante, pero resentido contra el destino que le ha transformado casi en un monstruo, y el otro, un hombre pusilánime y traumatizado por el horror vivido en la guerra, que le hace sentirse culpable de la terrible mutilación de su compañero, a quien cuida, protege y ayuda con devoción. La novela, que también tiene un punto intrigante, divertido e irónico, es un magnífico y sorprendente relato, que atrapa, conmociona y te deja sin aliento. Me ha gustado mucho.