Novela coral centrada en el universo femenino formado por las mujeres de una misma familia, madre, hija y tía. Otros personajes, con no menos importancia en sus vidas, son el marido/padre/hermano muerto, el amante, el pretendiente... El libro nos sumerge en los pensamientos –a veces demasiado enrevesados y faltos de esperanza–, deseos y miedos, de esas mujeres. No hay concreción temporal en la historia, tanto podría situarse hace 50 años como en una fecha más cercana.
Su lectura induce a reflexiones interesantes sobre temas diversos: las relaciones madre-hija, la maternidad o el derecho a decidir no tener hijos, los diferentes tipos de relaciones de pareja, el qué dirán, la soledad, la falta de comunicación y un largo etcétera.
Lo que más me ha gustado es el análisis psicológico que hace la autora de los personajes femeninos, bien plasmados, cercanos y verosímiles. Lo que menos la tristeza y pesimismo que refleja la novela en su conjunto. No obstante no me arrepiento de haberla leído; aunque en algún momento me ha costado seguir por esa constante e inquietante falta de esperanza latente, la narración es sencilla y se lee bien.