Doña Berenguela la Grande sólo tiene una obsesión: convertir en emperador del Sacro Imperio Romano Germanico a su nieto el infante Alfonso X el Sabio. Siglo XIII. En plena reconquista, la obsesión de la anciana Berenguela se vuelve enfermiza y ayudada por el Arzobispo de Toledo, Rodrigo Jiménez de Rada urden un plan para desposarlo con una princesa linajuda que habitaba en tierras noruegas y tener así más posibilidades para aspirar al trono del Sacro Imperio Romano. Contrariamente a los esfuerzos y deseos de su abuela y del clérigo, finalmente Alfonso X el Sabio acaba contrayendo matrimonio con Violante de Aragón, hija del rey Jaime I de Aragón. Pese a que finalmente años más tarde la esperara princesa Kristina de Noruega aparece en escena para contraer matrimonio con el ahora rey Alfonso X, dicho enlace queda anulado y pasa a casarse con su hermano el infante Felipe. La novela está bien ambientada y refleja fielmente la época sobre la que versa, la autora ha conseguido una impronta particular e interesante de los personajes que aparecen en el libro. También es interesante conocer la figura de la princesa Kristina de Noruega, prácticamente desapercibida en los libros de historia por tratarse de un hecho poco conocido y anecdótico. Recomendable. (David Sánchez)
hace 14 años