Este relato encantará a los amantes de las mascotas, tiene todos los ingredientes que encandilan a los animalistas (perros mostrando sentimientos como si fuesen humanos, dueños intentado superar la muerte de una mascota ). Pero si no te apasionan los animales o no tienes mascota en casa (es mi caso) la historia te parecerá ñoña y muy almibarada. Parece sacada de una películas de sobremesa que dan los fines de semana por la tarde. Le salva que es un relato corto (no llega a las cien páginas) y las ilustraciones. El precio de veinte euros me parece excesivo para el tamaño.
hace 6 años