En “La noche de los niños” se narra la historia de Bride, una joven de color de piel muy negra, guapa, segura de sí misma y con un trabajo exitoso. Pero a raíz de que, inexplicablemente, la abandone Booker, el único hombre por el que se había sentido comprendida, regresan a ella sus dudas e inseguridades de la niñez. Entonces, Bride iniciará un viaje para encontrarlo, que en el fondo será también una búsqueda de sí misma.
En mi opinión, se puede considerar una novela coral, ya que en sus páginas se da voz a distintos personajes que giran alrededor de la vida de Bride: Sweetness, su madre, que necesita justificar la educación que le dio a su hija; su amiga Brooklyn, siempre dispuesta a ayudarla; Sofia, que ha pasado años en la cárcel por abuso de niños; Rain, una niña con un pasado terrible; Booker, el novio que dejó a Bride, y Queen, su peculiar tía. El hecho de que muchos de los capítulos estén narrados en primera persona hace que sus personajes resulten muy cercanos al lector.
La trama abarca temas variados y profundos, como el racismo, el abuso infantil o lo mucho que nos afectan las vivencias de la niñez… El título de la novela, tanto el original “God help the child” como su versión traducida, “La noche de los niños”, hace referencia a la infancia oscura y dura que han tenido algunos de los personajes; no obstante, nos muestra también la capacidad de superación y de reconstrucción del ser humano.
Es el primer libro que leo de la autora y espero que no sea el último. A pesar de que al final me hubiese gustado saber algo más sobre los personajes secundarios, me ha parecido una novela muy bien escrita y entretenida, con un estilo directo y fácil de leer; una historia intensa que me ha encantado y recomiendo.