Una de las batallas más famosas de la Segunda Guerra Mundial fue la de Monte Cassino, en la que las tropas alemanas impidieron durante meses el avance de los aliados a pesar de estar en una considerable inferioridad numérica y de medios. Parker empieza el libro con un análisis de la decisión de invadir Italia tomada por las autoridades aliadas y de cómo la indecisión al respecto y las rencillas entre ingleses y americanos hicieron que la campaña no dispusiera de los medios humanos ni materiales, ni tuviera detrás la voluntad política necesarios para cumplir sus objetivos en el plazo previsto.