En un viaje el trayecto de regreso es el más íntimo. En el se van recordando con mimo los momentos más especiales: nombres, palabras, la calle en penumbra, una noche de viento, aquella carrera en la lluvía....detalles e instantes de esa vida que nunca volverá a ser aunque pudiéramos regresar. Yayo y yaya es como llaman en el Levante a los abuelos y abuelas. Yayerías son las historias de sus miradas, las miradas del abuelo y la abuela e antes, esa mirada de a quien el viaje se le acaba y quiere que sun canción no se olvide.