En 1937 ya es posible avanzar que un conflicto mundial es inevitable. Armand Rolzou de Saint-Gelais diplomático en la Sociedad de Naciones así lo entiende y se niega a participar en la inevitable carnicería. Junto con su mujer española, Constanza, decide emprender una nueva vida en una extraña isla, desaparecida de las cartas marítimas, en pleno Atlántico Norte. Allí dará inicio su apuesta por la paz en su mansión a la que llamarán Thule, como la mítica isla de Piteas, la última tierra del norte.
Un viaje absolutamente literario en cuanto entregado a la imaginación. Una novela de aventuras, en una isla imaginaria, que convive sin embargo con los embates más duros de la historia en pleno siglo XX. Un mundo nuevo, recreado en sus más mínimos detalles, en el que arranca una saga apegada a la realidad.
¿Pueden los hombres sustraer su destino al de sus gobernantes? ¿Es posible escapar de la historia o esta te alcanza inexorablemente? La plena ficción es el territorio para preguntarnos por la naturaleza real de la libertad del individuo frente al Estado. Como siempre lo fue antes de convertirse en un fresco del problema de cada individuo.
Una experiencia luminosa en la que los hombres ya no son competidores sino cooperadores en una naturaleza a la que respetan. Una novela en la que no hacen falta crímenes ni odios ni traumas ni dolor para acceder a la experiencia perfectamente humana de sobrevivir y convivir en una naturaleza primigenia.