¿Han servido ocho leyes generales de Educación para conseguir un sistema inclusivo y de calidad? ¿O, por el contrario, LOGSE, LOE, LOMCE o la reciente LOMLOE han contribuido a consolidar un modelo político populista y neoliberal en nuestro país? ¿Cómo afecta a la calidad educativa la ideología del cambio disruptivo continuo, que practican tanto gabinetes de izquierda como de derecha? ¿Cómo romper ese círculo de tópicos que ha enjaulado la educación en una neolengua burocratizada? ¿Cómo imaginar una alternativa real a la clasista y economicista, devolviendo la pedagogía a su función original? ¿En qué momento renunciamos a enseñar para maquillar nuestros fracasos? Son preguntas que trata de responder este ensayo.