Antonio Muñoz Molina afronta de forma valiente el conflicto de toda una generación de españoles en una novela río, de casi mil páginas, emocionante y estremecedora, que no dejará indiferente a nadie. Los detractores criticarán el punto de vista demasiado aséptico del autor y que se trata de un libro nada fácil de leer, al que cuesta engancharse y cuya prosa puede resultar pretenciosa, a ratos aburrida y con continuos saltos en el tiempo. Sus seguidores se encontrarán con una novela al más puro estilo Muñoz Molina, escrita con su particularísima forma de contar las cosas y cuyo planteamiento no sólo es muy ambicioso, sino que además es totalmente diferente a las novelas convencionales sobre la Guerra Civil española. Lo mejor, sin duda, la calidad narrativa del libro con magníficos personajes, retratos históricos y descripciones, y que no cae en el partidismo. Lo peor es que no es apta para todo tipo de lectores pues el ritmo de la trama es demasiado lento y abundan las descripciones amplias y detalladas, además de que su estructura puede resultar muy compleja. No dejará indiferente a nadie, imprescindible para incondicionales del ubetense. (J.G.F.)
hace 14 años