Posteguillo, es sin duda para mí el mejor escritor contemporáneo de novela histórica . Un libro que engancha y enriquece de principio a fín. Amílcar muere en manos romanas y su hijo Aníbal desencadena con el paso de los años un torrente de rabia contenida que llevará a Roma al borde del abismo. Un estado éste, de poder inigualable, refinado y con una cara que mostrar al mundo de esplendor ererigido por gobernantes que no titubean en sesgar vidas a quienes muestren el más mínimo punto de traición a la patria. Las estrategias, intríngulis políticos llevan a un gran número de poblaciones a morir en campos de batallas; inmensas superficies que se tiñen de rojo y de muerte infestadas por miles de cadáveres, precio por el que pagan soldados aguerridos y simples ciudadanos reclutados para satisfacer las ansias de poder de sus mandatarios. El poder tiene cuotas de precio muy altas, y el mundo se queda sin marionetas para la lucha. Es un lujo leer pasajes como el desarrollo de la "Batalla de Cannae", donde transmite de manera palpable, el horror de entonces; y resulta tan sumamente entretenido que llega a provocar un subidón de emoción.
hace 4 años