En este libro esclarecedor, el monje vietnamita Thich Nhat Hanh, uno de los grandes maestros espirituales de nuestro tiempo, sigue poniendo al alcance de los niños las enseñanzas de Buda, tal como hacía en Un guijarro en el bolsillo, del que la presente obra viene a ser una prolongación. En A la sombra del manzano rosal les propone nuevas prácticas, como la de “Invitar a la campana a sonar”, “La práctica de detenerse”, “Recordar al Buda”... Son prácticas que pueden realizar solos o acompañados, y tienen por objeto enseñar a los niños a relajarse, a meditar y a ser plenamente conscientes, para que aprendan a apreciar la belleza de cuanto los rodea y a gozar del momento presente.