Muy interesante novela. En un estilo sencillo, pero penetrante, la autora pone los puntos sobre las íes; desvelando, sin miramientos, la auténtica podredumbre moral de los "intelectuales" de su época. Excelente relato, de muy recomendable lectura.

El libro me lo he leído de un tirón. Es un libro valiente, muy valiente, y un poco terrorífico al ver la vida que han tenido muchas víctimas de depredadores sexuales como el que presenta el libro. Sin embargo, nos muestra una sociedad idiotizada, personalmente creo que poco creíble y, si me equivoco, lo de idiotizada se queda muy corto entonces. No es creíble una madre que consiente que su hija de 14 años se acueste con un tío de 50. No son creíbles unos amigos que no lo ven ni bien ni mal. Transigen. No es creible unos amigos y profesores que finalmente lo aceptan. A mi no me parece creíble y, repito, si me equivoco porque es real, la sociedad francesa está muy mal y digo la francesa porque no quiero extrapolar la situación a la española o a otras. De todas formas, merece la pena leer el libro para saber cómo funciona esta gente por si algún día podemos echar una mano a alguien a la hoja de identificarlos. Lo mejor del libro, la trama. No conozco mucha literatura ni cine que trate el tema tan crudamente como este libro. Enhorabuena a la autora y perdón por mi incredulidad; aunque no sé si es por la trama o por lo que ocurre en la sociedad en realidad.

Te quedas con el corazón encogido y una mala ostia en el cuerpo tremenda. Creo que al acabar de ver "Spotlight" sentí lo mismo. El relato de cómo un depredador sexual abusa de una (de muchas) niña de catorce años sin que nadie mueva un dedo por impedirlo hace que te vayas enfureciendo, leer cómo la engaña, cómo la engatusa, cómo la aparta de su entorno, cómo se justifica, cómo la niega te angustia, te entristece, te enfurece. Solo puedo esperar que G muera con un cáncer de testículos dolorosísimo que haga que la polla se le caiga a trocitos pequeños.