David es un chico muy simpático e inteligente: responde a todas las preguntas que hacen los maestros; le gusta contar historias divertidas y tiene, además, una perrita juguetona que se llama Pelusa. Pero cuando David llega a una escuela distinta se da cuenta de que no es bienvenido. Allí, los compañeros de clase no quieren que él participe en una visita que harán al circo y esto sólo porque David está ciego. Conoce esta historia que realza los valores de la aceptación y la amistad.