Un viaje al país del esperanto [encerrado en un museo], un paseo por la Habana en busca del chiste que mata a un escritor decimonónico, el encuentro con el último hablan del híbrido lingüístico entre el romaní y el euskera, una visita a la taberna praguense que sirve de escenario para el poema más desconcertante de Roque Dalton y un macguffin escatológico para rescatar del olvido a un erudito del medioevo son algunas de las misiones que Paco Inclán nos comparte en dadas las circunstancias. Cualquier parecido con la ficción es pura coincidencia.