Arruza, un bibliófilo de aspecto decimonónico y razón descarrilada, regenta El Globo, una librería anticuaria, movido por un amor loco a los viejos volúmenes adormecidos, las páginas vencidas por el moho y los antiguos lomos repujados e ilegibles. Junto a él, un cenáculo de clientes asiduos se reúne...