En esta tormentosa transición al tercer milenio, alza su voz un vigoroso movimiento de rescate de la conciencia de totalidad. La reflexión integra lo personal y lo transpersonal, nuestras raíces y nuestras alas. En su origen, la palabra terapeuta nos remite a los sacerdotes del desierto que cuidaban de todo el conjunto del fenómeno humano. Quizá la sinergia más importante de nuestro momento histórico se derive del encuentro entre la terapia contemporánea y la terapia de siempre.