La historia ha sido desde hace muchos, muchos años, una pasión que me acompaña en todo momento. Hechos de un pasado lejano o cercano que llenan mis horas muertas en los eternos viajes en tren, en las noches tranquilas después de una dura jornada. El pasado me acompaña. Y desde aquellos siglos pretéritos, son las mujeres las que más me fascinan. Llevo años rebuscando aquí y allí historias, anécdotas, hechos, que demuestren lo que no debería ser demostrado: que las mujeres son la mitad de la humanidad, igual en derechos y capacidades a la otra mitad.
Una búsqueda que ahora se concreta en un libro. Mi primer libro. Suena muy grande, para mi humilde persona. Y da mucho vértigo. Pero me hace muy feliz. Mujeres silenciadas en la Edad Media se ha hecho realidad gracias a Punto de Vista y su editor, José Luis Ibáñez Salas, que desde el primer momento en el que le planteé este mi proyecto creyó ciegamente en él.
Este libro recoge la vida de las mujeres en la Edad Media y recupera las biografías de algunos nombres propios excepcionales. Más allá de las reinas o las santas más conocidas, como Leonor de Aquitania o Juana de Arco, en los siglos medievales despuntaron otras mujeres en ámbitos tan dispares como la música o la ciencia. Escritoras de la talla de Cristina de Pizán y la excepcional Hildegarda de Bingen, o doctoras como Jacoba Felicié, reaparecen en esta obra reivindicando su lugar en la historia.