En esta historia la protagonista es Shuzu, una joven diferente, peculiar, apasionada de un arte destinado a los hombres. Con esta premisa nos adentramos en un mundo sexista, con roles diferentes para hombres y mujeres, donde quedará patente la confusión de la protagonista con respecto a su identidad de género. Inmersa en esta sociedad debe decidir si continuar su práctica de artes marciales, considerada una actividad masculina, o cumplir con su rol femenino y aceptar la petición de matrimonio de un compañero.

Es una narración que parece sencilla, pero es mucho más: trata muchos temas diversos como la amistad, la justicia, el éxito y el fracaso, la bondad y la maldad. El aspecto que destaco y que más me ha sorprendido es el feminismo de la protagonista a mediados del siglo diecinueve junto con otro tema que también está de actualidad: la identidad sexual y los roles de género. Además, la capacidad de adaptación de los personajes a un destino que está fuera de su control es admirable, ya que la historia cuenta con un trasfondo bélico que pondrá en riesgo el futuro de los samuráis y , por tanto, de Shuzu y su padre. Las circunstancias externas precipitarán la decisión de Shuzu, pero también sacarán su lado más maduro mostrándose fuerte, valiente y determinada, especialmente a proteger a otras mujeres.

La trama está llena de reflexiones y matices oscuros y la forma de narrar del autor es sencilla y directa, sin ser simple, con diálogos interesantes y atrevidos.

Es una historia conmovedora y adictiva, con capítulos cortos. Los personajes están bien diferenciados y definidos: inocentes, crueles, comprensivos, frágiles o fuertes, destacando el padre de Shuzu y una entrañable compañera de artes marciales que será un gran apoyo en momentos críticos. Los sentimientos de los protagonistas están muy bien representados: angustia, confusión o soledad... Y puedes entender sus motivaciones y decisiones. Llegas a amarlos u odiarlos a lo largo del libro, que es esencialmente el destino de Shuzu y sus familiares y amigos. Los personajes y el worldbuilding se interrelacionan creando una trama profunda y emotiva. (Noemí Hernández, 14 de agosto de 2023)