Vivimos la sexta gran extinción de especies que ha tenido lugar en la Tierra. Pero esta vez somos los responsables. ¿Cómo confrontar el miedo que genera esta inconcebible pérdida en la gran «familia de los vivos»? Bird Rose nos propone pensar, sentir e imaginar a partir de un caso concreto: los perros salvajes de Australia, los dingos, objetivo de un feroz intento de erradicación por parte de ganaderos y autoridades. Tras años conviviendo con los aborígenes (que se sienten descendientes de los dingos) e interiorizando su visión de la existencia, la autora nos da cuenta de la necesidad de rehacer el marco antropocéntrico de nuestro pensamiento: la ciencia ha demostrado que la vida es un único tejido de conexiones entre especies, nuestra vieja ética antropocéntrica debe ensancharse.