“¿Cómo edificar un mundo nuevo con palabras viejas? Envidia, placer, ambición, soberbia, inocencia, muerte. Todas caben bajo el nombre de un dios, bajo el nombre de un diablo: Hernán Cortés”.
Canarias, 1525. El joven cronista Diego de Soto, desilusionado con las cloacas de poder del incipiente Imperio español, decide embarcarse en una expedición y dejar atrás su vida en la corte. Pero una inesperada tormenta obligará a su nave a cambiar el rumbo, separarse del resto y refugiarse en las costas orientales del continente que acaba de conquistar Hernán Cortés con tan solo quinientos hombres. De la noche a la mañana, De Soto consigue hacer realidad un sueño: conocer al legendario conquistador del Imperio azteca. Sin embargo, esa admiración pronto se convertirá en sospecha, pues una serie de asesinatos pretenden acallar lo que ocurrió ocho años atrás, cuando los españoles se vieron obligados a abandonar Tenochtitlán y perdieron para siempre el famoso tesoro de Moctezuma.