Desigual narración de relatos cortos, algunos muy entretenidos, otros realmente flojos. El mayor problema del libro es que Alfred Hitchcock adaptó para la pequeña pantalla algunos de los mejores relatos. Si los recordamos, aunque solo sea vagamente, pierden fuerza narrativa y no nos sorprenderán, que es la intención con la que fueron escritos. Los que no recordamos, mejor olvidarlos. A pesar de todo, si fuimos fans de La Hora de Alfred Hitchcock o de Alfred Hitchcock Presents, o si no tuvimos la suerte de disfrutarlos en televisión, nos gustará el libro.
hace 15 años