Publicados en 1908, bien entrada ya la quinta década de su existencia, Miguel de Unamuno (1864-1936) rememora en estos RECUERDOS DE NIÑEZ Y DE MOCEDAD los primeros años de su vida, los transcurridos en Bilbao hasta su partida a Madrid para estudiar en la Universidad. Aparte del interés que reviste por su carácter autobiográfico y de la amenidad de los episodios que en ella se narran -los juegos, las peleas, las primeras sorpresas y desilusiones, el nacimiento al arte y a las inquietudes espirituales, maestros, condiscípulos, veraneos-, la obra constituye un eslabón inevitable en la trayectoria del autor, que sin duda, en su constante pugna contra la muerte, no podía dejar que toda esa parcela de su existencia quedara sepultada en la oscuridad y el silencio del olvido.