El libro es una auténtica fumada, del mismo color que su portada...un amarillo en toda regla. No me parece una historia entrañable. Da a conocer cómo empezó el movimiento psicodélico desde un punto de vista periodístico. Hay un puñado de personajes de los cuales ninguno exceptuando el protagonista se hace destacar dentro del resto. El autor como buen americano hace una dura crítica de México y degradando a sus habitantes durante el periodo que Ken Kesey está en el exilio. De todas las pruebas del ácido y fiestas que es más de lo mismo una tras otra, lo que más me divirtió fue cuando los Alegres Bromistas van junto a su lider al campus para opinar sobre la guerra de Vietnam. En resumen me ha parecido una novela tediosa de leer sobre todo la primera mitad adaptarme a los diálogos y a la atmósfera que el autor pretende crear. Desconozco si hay o habrá pelicula sobre el movimiento beatnik iniciado por Ken Kesey pero no dudo que sería mejor que el libro, cosa poco habitual en la inevitable comparación novela-pelicula.
hace 6 años