No hay nadie en casa es un seductor híbrido de géneros, compuesto de artículos, de viñetas y ensayos, de relatos de lo vivido y de lo pensado, un vasto paseo por literaturas, vidas, ciudades e ideologías. Agudo, inteligente, conmovedor en ocasiones, se lee con la rapidez y avidez de las grandes novelas. Todo un mundo, familiar y extraño a la vez, se despliega en este libro pleno de iluminaciones, de perspectivas únicas sobre la literatura, la geopolítica, el Este y el Oeste. Porque Ugresic es una escritora que no se pone límites ni se fija coordenadas; que explora todo el espectro y maneras de nuestro existir, y que tiene un ojo más que clínico para las paradojas, las falsas verdades, las realidades curiosas. Un ojo clínico -y crítico- que nunca falla al descubrir lo que ocultan los usos sociales y las costumbres, lo trágico, lo insólito, lo cómico de la cotidianeidad.