La trama con la que empieza el libro no resulta atrapante, y te preguntas el cómo le hará la autora para que el misterio se siga alargando hasta la página 350. El misterio sobre la búsqueda del marfil es aburrido y poco atractivo, sumándole que la historia se ralentiza, pudiéndote desesperar. A parte de la trama del marfil, aparentemente la principal, te mostraba otra, la cual era sobre el trabajo voluntario de Hester, esposa de Monk, que resultaba, al igual, lenta. Hay algo que la mayoría concuerda al leer este libro, es la lo encantador que resulta la descripción del puerto, la vida en él, los negocios en él, los crímenes en él, etc. Eso te hace explotar la imaginación, pues eres capaz de recrear en tu mente la sociedad de la época que se contextualiza el libro. Sorprendentemente, el misterio del marfil se resuelve con muchas páginas sobrantes, pero aún queda por resolver la pregunta sobre la muerte de uno de los tripulantes. Las dos tramas que se maneja en el libro se entrelazan y la convivencia de Hester con las demás chicas es entretenido; en las descripciones que hace la autora, puedes sentir la fatiga de ellas, el sueño, y por supuesto, las ojeras. El misterio que surge a mitad del libro no es tan predecible, cosa que se agradece. Repito, es increíble que la autora nos dé un vistazo de lo que era la sociedad de Londres en los puertos y demás. Un libro nada perfecto, pero sí interesante.
hace 2 años