Veinte años después de instalarse en El Valero, un destartalado cortijo en la Alpujarra granadina, adonde llegó huyendo del mundanal ruido, Chris Stewart se enfrenta a un acontecimiento trascendental en su vida familiar: su hija Chloé se dispone a abandonar el nido para asistir a la universidad. Semejante cambio obliga a Chris a un reset general de sus hábitos y sus rutinas, nada que asuste a un tipo cuya insaciable curiosidad y capacidad de empatía —plasmadas en su célebre trilogía Entre limones, El loro en el limonero y Los almendros en flor, de gran éxito en España y Reino Unido— le han granjeado el respeto y la admiración de sus vecinos alpujarreños. Convertido en una especie de celebridad literaria en la zona, Chris utiliza su fama para ayudar a su antiguo socio en el negocio de esquilar ovejas, prepara una comida ante las cámaras de televisión para un conocido chef británico que ha acudido de visita, y descubre los riesgos de hablar en público en español. Sólo una pequeña muestra de las innumerables historias que surgen en su querido cortijo, donde Chris, devenido un hombre de campo de entusiasmo inagotable, se encuentra en su elemento. Allí con la ayuda de Ana, su mujer, y rodeado de perros, gatos y ovejas, acabará ostentando el flamante título de agricultor ecológico y cultivará unos limones y naranjas muy apetitosos.