Rebeka, veinteañera y bilbaína, odia las despedidas de soltera, pero muy a su pesar se encuentra en Londres celebrando una. Mientras lamenta su suerte en la barra de un bar, conoce a Gary, norirlandés treintañero, quien se presenta a sí mismo como una estrella del rock. Tras una noche de risas, cervezas y chupitos, Rebeka se despierta en casa de Gary. Y menuda sorpresa cuando descubre que no solo es una estrella del rock: es el cantante y fundador de Everlasting Wound, uno de los grupos con más tirón del momento. De vuelta en Bilbao, Rebeka trata de retomar su rutina en la universidad, con su exnovio, que es bastante capullo, con su amiga Ana, que reparte consejos poco ortodoxos, y con un Gary que no la va a dejar escapar. Y es que hay parejas que cocinan las relaciones a fuego lento, y hay otras que se consumen desde el primer día. Pero los monstruos de la fama, el pasado y el futuro van a hacer que las ochocientas cincuenta millas que separan Londres de Bilbao sean el menor de sus problemas?