Los mejores directivos destacan sobre todo por una cualidad esencial: saben qué, hacer con los empleados problemá,ticos, aquellos individuos con una buena productividad personal pero que dificultan la tarea de sus compañ,eros. Esta habilidad no se aprende en las aulas, responde casi siempre a planteamientos subjetivos y depende mucho má,s del desarrollo de un buen criterio personal que de modelos preestablecidos. Los casos de la Harvard Business Review le ofrecen una guí,a basada en los consejos de los má,s experimentados gestores empresariales para saber qué, hacer en las situaciones má,s delicadas: cuando, por ejemplo, uno de nuestros vicepresidentes tiene un acceso de có,lera en la cafeterí,a, nos enteramos de una relació,n extra conyugal del consejero delegado, un trabajador excé,ntrico comienza a comportarse de manera amenazadora o un empleado cesante enví,a un e-mail en el que revela el sueldo de todos los empleados...