Resumen

El autor de Libertad y Las correcciones demuestra su versatilidad, su agudeza y su talento narrativo en esta colección de ensayos tan personales como contemporáneos. El enorme talento narrativo de Jonathan Franzen así como su inagotable afán por exponer la realidad con rigor y honestidad, se ponen de manifiesto en esta recopilación de veintiún textos de no ficción que incluye ensayos, artículos, reseñas y discursos escritos en los últimos años. El título del libro hace referencia a la isla Alejandro Selkirk —denominada Masafuera hasta 1966—, el islote más apartado de los tres que componen el archipiélago Juan Fernández, situado a unos 800 kilómetros de la costa continental de Chile. Hasta ese remoto lugar, poblado sólo por aves, osos marinos y una veintena de familias de pescadores temporeros, se desplazó Jonathan Franzen para reponerse de una agotadora gira promocional, con la intención de releer Robinson Crusoe y depositar las cenizas de su amigo y colega David Foster Wallace, muerto dos años antes.

2 Críticas de los lectores

5

Nada que ver con el resto de su obra, este libro acaba siendo una mezcla inconexa de piezas que no aportan mucho sentido global. Alguna se salva, pero otras resultan aburridas y demasiado específicas. A quien solo haya leído esto de Franzen, que lea mejor sus novelas, verá que merece mucho la pena.

hace 1 mes
3

Es el primer libro que leo de este autor y me ha parecido muy buena su técnica narrativa, pero, excepto el que narra su relación de amistad con David Foster Wallace y que da título al libro,las conferencias, ensayos, artículos sobre episodios intrascendentes de su vida, sus ideas acerca de la naturaleza de la novela y de la literatura en general…me han aburrido tanto que le he dejado de leer .No puedo recomendarle

hace 4 años