Un gran clásico que merece la pena leer. Puede resultar desmedido y, por otro lado, desfasado ya que hoy en día esta novela sería mucho más explícita. Si se sabe leer entre líneas y adaptar el mensaje, es del todo válido: quien lleva las riendas de una relación dispone mientras que el que se deja llevar desarrolla una mayor dependencia emocional y se ve más expuesto al sufrimiento.
hace 4 años