En el fondo, el duelo es un proceso de aprendizaje interior acerca de la pérdida de algo valioso.En efecto, las personas que pasan por tan difíciles circunstancias suelen convertirse, en muchos aspectos, en gente con una sabiduría especial, pues saben que hacer frente a su pérdida les ayudará a dominar su sufrimiento. Es como si se les abrieran las puertas de la comprensión, dando paso a un proceso de transformación interior. Con palabras de la propia autora: ?Vivir ?para decir adiós? significa vivir sin miedo a la muerte, sin desesperación ni tragedias. Es decir, saber aceptar con alegría la vida, tal como se nos presenta, permanentemente conscientes de que, en este mundo transitorio, podemos disfrutar de unos valores que la muerte es incapaz de destruir?.