Enrique Jardiel Poncela es un personaje sorprendente por sus claroscuros, su ingente producción literaria, su renovador sentido del humor y los grandes éxitos y fracasos que cosechó, tanto en vida como después de su muerte. Ya lo resume su epitafio, no sin ciertas dosis de reproche y de humor negro: "Si buscáis los mayores elogios, moríos". "Eloísa está debajo de un almendro" está considerada como una de sus mejores obras. Sus hilarantes situaciones y sus personajes trastornados crean un divertido retrato de lo absurdo que trasciende las barreras del tiempo, convirtiéndola en todo un clásico del teatro de humor.