Se recogen en este libro las conversaciones del autor con dos genios del Ampurdán. Mantenidas a finales de los años setenta, son una muestra de las opiniones e intereses de Josep Pla y Salvador Dalí, así como de su forma de vivir y hacer frente al mundo. Si Pla representa la sensatez y Dalí el delirio, a través de ambos talantes se expresa la soberana inteligencia del gran hombre de mundo, culto e inquieto. Cosmopolitas ambos, también están ambos enraizados en el pequeño universo en el que nacieron, con lo cual responden —cada uno a su manera— al dilema de cómo salvaguardar las raíces locales en nuestro mundo globalizado.