Es el segundo libro que leo de este autora (el primero fue Las hijas de la tierra) y me ha encantado. Sus novelas son una mezcla entre Isabel Allende y Stephen King, aunque con su propio estilo. Los personajes femeninos suelen tener mucha fuerza y son capaces de enfrentarse a todas las adversidades y los masculinos cuentan con una psicología bastante desarrollada ( los femeninos también). Además, la autora nos sumerge en el lugar en el que transcurre la trama y sus argumentos siempre enganchan hasta el final. En sus novelas podemos encontrarnos con sorpresas que no esperamos (aunque una parte del final sí la imaginé antes de leerla) y eso las hace aún más interesantes. Una literatura de calidad altamente recomendable.
hace 1 año