El shinto juega un triple papel en el conjunto del desarrollo cultural de Japón. En primer lugar, el shinto es la expresión más pura y refinada del paradigma cultural autóctono que presenta la historia de este país. A este paradigma le llamaremos «cultura shinto». En segundo lugar, el shinto como religión diferenciada respecto al budismo y otras formas religiosas provenientes del continente, tiene un papel propio y exclusivo en la formación del conjunto religioso de la historia del país. A este factor le llamaremos «religión shinto». Y en tercer lugar, el shinto es además conocido como el sustrato ideológico del nacionalismo japonés. A este tercer aspecto del shinto le podemos llamar «ideología shinto». Alfonso J. Falero, doctor en Shintoísmo por la Universidad Kokugakuin en Tokio, es profesor de pensamiento japonés en la Facultad de Filología de la Universidad de Salamanca.