Planchar le aquietaba el pensamiento, le devolvía el sano juicio, como si el quitar arrugas fuera su manera de arreglar el mundo. Todo cambia para Lupita -mujer policía, poco agraciada, alcohólica, maltratada- la tarde en que el licenciado Larreaga es asesinado en la esquina de Aldama con Ayuntami...