Cuando leí el resumen de la contraportada del libro imaginé que encontraría una novela de contenido humorístico abundante en estereotipos de las lecciones idealistas impartidas en los países "emergentes" o "pendientes de emergencia" por turistas occidentales soñadores. Sin embargo, el argumento del libro se centra excesivamente en torno a la marcha revolucionaria de "El Capitán", que si bien incluye algunos de esos estereotipos, terminando por resultar un tanto repetitivo y pesado. Como punto a favor, el autor demuestra un innegable dominio de la lengua contemporánea española.
hace 12 años